En 1953, la Casa del Arquitecto de la Ciudad de México organizó un encuentro sobre integración plástica, en el cual participaron algunos artistas y arquitectos entre los que figuraban David Alfaro Siqueiros, el pintor y arquitecto Juan O’Gorman (1905-82), además de Raúl Cacho y Enrique del Moral (1905-87). De esas pláticas se publicaron en la prensa algunos artículos como el de Siqueiros “Arquitectura internacional a la zaga de la mala pintura” (ver doc. 786079) y “En torno a la integración plástica” de Carlos Mérida (1891-1984). En este último, las ideas de Mérida sobre la integración dan un giro; sus reflexiones lo llevan a concebir una arquitectura integral, estructurada de tal forma que no será necesaria la participación directa del artista plástico. Abandona así el concepto de la colaboración estrecha entre arquitectos, pintores y escultores desde la concepción del edificio, expuesta por el artista en textos anteriores (ver doc. no. 733512). Carlos Mérida, a través de sus escritos nos muestra un horizonte de más de seis décadas del quehacer artístico en México. Su visión, sumamente crítica y seductora, refleja el pensamiento de un personaje que no sólo comparte, en el espacio-tiempo, los diversos desarrollos del ejercicio artístico, sino que sus ideas aportan nuevas lecturas y puntos analíticos distintos a los que marcaron su época. El pintor escribió, además del desarrollo plástico de México, sobre temas como la caricatura, la fotografía, la danza, el cine, el diseño y el arte popular tanto de México como en su Guatemala natal. Inclusive, realizó profundas reflexiones sobre la composición, el sentido y la función del arte. El manuscrito con anotaciones se encuentra, también a disposición de los investigadores, en el Archivo del Museo Nacional de Arte (MUNAL, Ciudad de México).